Literatura

Sirocco

El siroco toca en mi ventana. «Vete, no hay nadie», le digo bajito. Porfiado, como aquellos chivitos desobedientes, insiste en colarse en mi casa. Soy caribeña, de aguaceros y humedades. No entiendo la lengua del viento caliente, con su ropaje desértico. Tengo la garganta reseca y las palabras sofocadas. Invoco un par de dioses nórdicos para ver si caen

Océanoterapia

Respira todo el azul que te quepa en las células. Siente el salitre oxigenando tu sangre. Deja que el agua desborde tus sentidos. Tantea la brisa marina. Acaricia cada piedra, las caracolas, las algas, las corrientes. Imagina unas manos que van desnudando tu sombra. Escribe un mensaje breve o extenso, optimista o apocalíptico, de amor

Atasco

Tiritan de frío. Se apretujan y poco a poco van formando una masa compacta, indivisible. Entonces se atascan. Comienzo a atragantarme y no hay manera de echarlas fuera. El viento las azota apático y se les pone una piel de gallina morada. Se apiñan más aún hasta volverse una pelota monumental. Porque llegan otras, las

Orillas

No te olvides que camino por esta orilla siguiendo mis propias huellas y buscando las tuyas. Aunque el faro está apagado, hay una luz interior que se proyecta sobre las olas y sobre el destino. La espuma rompe enloquecida sobre las rocas, me salpica y el salitre de estas costas que son también las tuyas

Sombras y luces

Entre tantas sombras la luz fue haciendo un agujero y logró salir a la superficie. Asomó tímidamente la cabeza y comprobó que el mundo podía ser una mirada, una melodía, un brevísimo candil que anuncia la noche, una caricia inocente que tiembla en la punta de los dedos. Impaciente, la luz quiso mostrar todo su

Soy inocente

Yo la quiero o, mejor dicho, la idolatro. Cuarenta y dos años juntos y en armonía. Ella siempre tan dócil, tan complaciente, bajando la cabeza para no ofenderme ni con la mirada. A veces me pasaba con la bebida, lo sé, pero llegaba a la casa y me iba derechito a la cama. Yo no

El último viaje

El viejo barco roza levemente las aguas soñolientas. Navega con parsimonia porque le pesan los años y las mataduras. El sol desciende aliviado después de un largo día. Cientos de gaviotas revolotean disputándose los restos de una escasa captura. Los peces agonizan sobre la cubierta, atrapados en una red  descolorida y mugrienta, los ojos desorbitados,

Compra y venta

Ha pensado en ti otra vez y lo cierto es que es un lujo que no puede permitirse. Hay pensamientos que salen caros y ella no puede pagarlos. No tiene empleo, no recibe subsidios y está demasiado vieja para sobresaltos. No es más que un hada centenaria y humilde que mordió la manzana podrida y

Mensaje

Encontró una botella abandonada por la marea en la orilla. Dentro había un mensaje incompleto. Un par de frases invitaban a continuar la historia. Cada palabra buscaba desesperadamente la complicidad de la otra. Les daba lo mismo completar un verso, una reflexión, una declaración de amor o un breve relato. Desconcertada, se sentó sobre una